1Preparar un molde redondo que pueda ir a la mesa de 15 cm (6 pulgadas) de alto.

2Cortar una tira de papel aluminio o manteca del largo de la circunferencia del molde y de 8 a 10 cm (4 pulgadas) de ancho.

3Colocar la tira del papel alrededor de la parte exterior del molde y asegurarla con hilo grueso.

4Debe sobresalir, como una pestaña, unos 5 cm (2 pulgadas) por encima del borde del molde.

5Colocar las fresas en un colador y presionarlas con una cuchara para que pase la pulpa de la fruta.

6Descartar las semillas.

7Batir las claras hasta que estén espumosas y agregarle, gradualmente, el azúcar, batiendo bien después de cada adición.

8Aparte colocar la crema pastelera, ya fría, en un recipiente grande y agregarle la crema chantilly en forma envolvente.

9Agregar la pulpa de fruta y mezclar bien. Incorporar luego, con una espátula, las claras batidas en forma envolvente.

10Verter toda la crema en el molde preparado y llevar al congelador durante 5 horas.

11Pasar el soufflé a la refrigeradora 3 horas antes de servir.

12Retirar el papel aluminio. Decorar con fresas y hojitas de menta.