1Pon las costillas de cerdo y 2 dientes de ajo pelados a dorar en una cazuelita con un chorrito de aceite. Cuando estén bien dorados, agrega los ajos frescos picados y rehógalos un poco.

2Vierte la sidra. Dale un hervor y vierte 200 ml. de agua. Deja que reduzca a fuego medio durante 15-20 minutos. Retira los huesos y tritura la salsa. Lígala con una cucharadita de harina de maíz refinada diluida en agua fría. Pon a punto de sal y espolvoréala con un poco de perejil picado. Resérvala.

3Cuece las patatas en una cazuela con agua y una pizca de sal durante 20-25 minutos. Cuando se templen, corta 4 rodajas gruesas de cada una y extiéndelas sobre la placa del horno. Pica los otros 2 dientes de ajo, mézclalos con la yema y una pizca de aceite. Pon una pequeña porción sobre cada patata. Hornea a 180ºC durante 5 minutos con el horno precalentado.

4Salpimienta los filetes de lomo frescos y cocina todos los filetes brevemente en una sartén untada con un poco de aceite.

5Sirve el lomo, salséalo y acompáñalo con las patatas al gratén. Sazona las patatas y espolvorea con orégano. Decora con perejil.

6Consejo: Si la salsa de ajos te queda muy clara, puedes oscurecerla agregándole un poco de salsa de soja. Como la salsa de soja es bastante salada, te recomiendo no sazonar la salsa hasta que esté terminada.