1Este plato, gracias a su contenido en vitaminas y minerales, interviene en el crecimiento óptimo del niño. Por eso, es un buen entrante para servir a los más pequeños en las comidas de Navidad o en ocasiones especiales.

2Cuece 8 huevos en una cazuela con agua hirviendo durante 10 minutos. Escurre, refréscalos con agua fría, pélalos y córtalos por la mitad, a lo largo. Retira las yemas y reserva tanto las yemas como las claras cocidas.

3Para hacer el relleno, pela y pica la cebolleta y el diente de ajo finamente y pon a pochar en una sartén con un chorro de aceite. Pica los champiñones, agrégalos y cocínalos un poco. Sazona. Pela y pica las gambas e incorpora. Cocina. Incorpora 4 yemas (8 mitades) reservadas. Coloca el relleno en un vaso batidor, y tritura con la batidora eléctrica. Introduce la masa en una manga pastelera y rellena los huevos cocidos.

4Para hacer la mayonesa, casca el huevo restante en el vaso batidor, agrega una cucharadita de vinagre, una pizca de sal y una buena cantidad de aceite. Introduce el brazo de la batidora eléctrica en el fondo y, sin moverlo, tritura hasta que empiece a emulsionar. Cuando coja cuerpo, mueve la batidora poco a poco de arriba a abajo y mezcla bien. Napa los huevos con mayonesa y gratínalos en el horno. Reserva.

5Para hacer la salsa, coloca el resto de las yemas de huevo cocidas en una cazuelita. Agrega la nata, unas gotas de vinagre y cocina brevemente. Incorpora un poco de perejil picado y deja reducir. Para servir, pon un poco de salsa en el fondo del plato, coloca encima unas mitades de huevos rellenos y decora con perejil.

6Si al pelar los huevos se queda pegada la cáscara, pásalos por debajo del grifo y se desprenderá con facilidad.

7Información nutricional: Un plato para el crecimiento de los niños