1Verter la harina en un plano y poner en el centro la mantequilla suavizada, el azúcar, una pizca de sal, un poco de leche fría y el huevo.

2Mezclar todo por 10-15 minutos, hasta obtener un compuesto liso y mórbido.

3Formar una bola y dejarla posar en un lugar tibio por una hora.

4Mientras tanto pelar las manzanas, rebanarlas y ponerlas en una cazuela.

5Verter la pasa en un tazón y cubrirla con un vaso de vino rancio.

6Sumergir las nueces en agua hirviente con las almendras y las avellanas, luego pelarlas y añadirlas a las manzanas con los piñones.

7Cortar en pedacitos los higos secos y la fruta confitada, poner todo en una cazuela con el chocolate cortado en daditos, el azúcar, las semillas de anís, un poco de corteza de limón rallada, la canela y la nuez moscada.

8Escurrir y secar la pasa de Corinto, luego añadirla a los otro ingredientes, vertiendo el vino rancio quedado y mezclando todo.

9Enharinar un plato, verter la pasta y con un rodillo formar una hoja muy fina. Verter el relleno en ella.

10Enrollarla, estrujando sus extremidades para cerrarla.

11Untar una placa del horno y cocerla por 50-55 minutos a 180°grados.

12Esta torta se puede comer tibia o fría.