1Batir los huevos y el azúcar hasta que la mezcla espume y se esponje, tiene que tomar un aspecto amarillo clarito, agregar a esta mezcla la harina tamizada mezclada con el cacao, la mezcla la haremos dando cortes con la espátula y procurando revolver lo menos posible, finalmente añadir la mantequilla fundida.

2Untar con mantequilla un molde redondo de 22 cm. De diámetro, enharinar, sacudir el molde para que caiga el excedente de harina, llenar el molde con la pasta.

3Hornear a 180º c 20/25 minutos o hasta que introduciendo una aguja, ésta sale limpia, no conviene abrir el horno hasta los 20 minutos, ya que se puede bajar la torta.

4Desmoldar y dejar que se enfríe sobre una rejilla, de modo que le dé el aire por todas partes.

5Preparar un jarabe con 200 gr. De azúcar sémola y 1/3 de litro de agua.

6Perfumarla con kirsch.

7Rallar en virutas gruesas los 200 gr. De chocolate amargo y ponerlas en el refrigerador.

8Cortar el bizcocho en tres discos.

9Empapar en jarabe los fondos de pasta enfriados.

10Montar los 2 litros de nata con los 80 gr. De azúcar glasé y 2 bolsitas de azúcar con vainilla.

11Revestir cada fondo de bizcocho con una cuarta parte de la nata montada y distribuir encima de cada disco cerezas en aguardiente, bien picadas.

12Recubrir el exterior del pastel con el resto de la nata montada.

13Decorar todo el pastel con virutas de chocolate e incrustar en la nata unas cerezas enteras.

14Servir bien fresca.