1Lavar los solomillos y secarlos con papel absorbente.

2Abrirlos, dándoles un corte en sentido longitudinal.

3Aplastarlos, salpimentarlos y reservarlos.

4En un cuenco, poner a remojo las ciruelas deshuesadas, las pasas y los piñones en el jerez durante 30 minutos.

5Batir enérgicamente los huevos y mezclarlo con la carne de magro picada, el pan desmigado, 1 manzana pelada y troceada, las pasas y los piñones y la mitad de las ciruelas picadas.

6Colocar la mezcla en el centro de uno de los solomillos y cubrirlo con el otro.

7Atar ambas piezas con un bramante (cuerda de cocina), haciendo que coincidan los bordes.

8Salpimentar la carne y enharinarla.

9Calentar el aceite en una sartén y dorar la carne por todos lados a fuego vivo.

10Pasarla a una fuente refractaria, colocar las ciruelas restantes y las manzanas peladas y troceadas, regar con el vino de maceración (si durante la cocción lo vemos seco, añadir un poco más de vino o caldo), y hacer en el horno precalentado, a temperatura media (175º), unos 35-40 minutos.

11Extraer los solomillos, dejar templar, quitar el bramante y cortar en lonchas.

12Servir con la manzana, las ciruelas y la salsa aparte.