11 El primer paso será trabajar la carne. Para esta receta de solomillo en salsa de queso puedes usar tanto solomillo de cerdo, como solomillo de ternera. Dependiendo del tamaño de la pieza, corta la carne en medallones o en filetes. El corte es al gusto y puedes pedirlo directamente en la carnicería.

22 Para hacer la salsa, ubicamos un cazo o la olla donde solamos cocinar normalmente y la ponemos a fuego medio.Cuando se derrita la mantequilla, baja el fuego al mínimo y añade el queso roquefort desmenuzado, ve removiendo todo hasta que se deshaga el queso casi por completo.

33 A continuación añade poco a la nata y una pizca de pimienta. Remueve la salsa de forma constante, con ayuda de una cuchara de madera, hasta que tome la consistencia deseada. En unos 5-7 minutos estará lista. La diferencia entre la nata o crema de leche y la leche evaporada es su porcentaje de grasa. Nuestras recomendación es usar leche evaporada o una crema de leche ligera, de esta forma obtendremos una salsa de queso menos pesada y con todo el sabor del queso roquefort. Truco: A esta salsa puedes añadir otros ingredientes como champiñones.

44 Mientras, calienta una sartén untada ligeramente con aceite y cocina los solomillos de carne a tu gusto, hechos o al punto, dorando la carne de lado y lado. Sazona con sal y pimienta al gusto.

55 Mezcla los jugos de la carne, que han quedado en la sartén, junto con la salsa que tenemos ya preparada, dale un toque de calor y sirve el plato decorando con una ramita de perejil.

66 El solomillo en salsa roquefort es un plato muy fácil de preparar y con una presentación que puede resultar muy elegante. Si prefieres rebajar el sabor del queso azul puedes revisar la receta de solomillos al roquefort suave, donde usamos una mantequilla de roquefort para darle un toque especial a la carne, ¡te encantará!