RECETA
- 800 g de solomillo
- 400 g de queso de tetilla
- 4 cucharadas de nata líquida
- Aceite de oliva
- 1 cucharada de pimienta negra
- 1 cucharada de pimienta rosa
- Pimienta blanca
- Sal
1Dividimos el solomillo en cuatro partes, en una cazuelilla antiadherente, ponemos el queso sin corteza y lo ponemos a deshacer al baño maría, añadimos la mitad de la pimienta negra y la pimienta rosa molida, moliéndolas en el momento, cuando esté cremoso, añadimos la nata líquida, removiendo constantemente.
2En una sartén antiadherente, con el fondo ondulado ponemos dos o tres cucharadas de aceite de oliva, lo calentamos a fuego vivo.
3Mantenemos siempre a fuego vivo, primero durante 3 minutos, después le damos la vuelta y los sazonamos con sal, los salpicamos con pimienta negra y rosa recién molida, mantenemos los solomillos dos minutos más y los sacamos a una fuente caliente, sazonamos de igual manera el lado que acabamos de hacer.
4Servimos los solomillos recién hechos con unas cucharadas de la salsa de queso caliente por encima.