1Se calienta a fuego suave la manteca y se le agrega la harina, se remueve hasta que empiece a tomar un color oscuro, sin que se queme.

2Agregar el caldo poco a poco sin dejar de remover, se agregan los tomates y se sigue removiendo hasta que empiece a hervir.

3Cuando empiece a hervir se deja cocer unos 30 minutos.

4Una vez que la salsa haya cocido se retira la grasa que sobrenade y se pasa por un tamiz fino.

5Se puede agregar al final un poco de mantequilla fresca.

6Esta salsa no debe quedar espesa.