1El día anterior, lavar el bacalao en agua y ponerlo en un recipiente con agua. Meterlo en el frigo durante toda la noche, cambiando el agua varias veces

2Al día siguiente, escurrir el bacalao, ponerlo en una olla con agua abundante sobre el fuego fuerte hasta que el agua empieza hervir. Bajar el fuego y dejarlo al fuego lento durante 15 minutos. Escurrir, dejar enfriar y trocear el pescado con los dedos, quitando las espinas

3Calentar 4 cucharadas de aceite de oliva en una sartén grande y freír las patatas - conviene hacerlas en varias sesiones. Cada vez que se sacan las patatas ponerlas sobre papel de cocina para eliminar el aceite

4Una vez hechas las patatas, cambia el aceite de la sartén y sofreír la cebolla y la hoja de laurel hasta que esté muy hecha la cebolla (20 minutos).

5Quitar la hoja de laurel, añadir un par de cucharadas de aceite a la sartén con la cebolla, remover y luego incorporar el bacalao y las patatas

6Batir los huevos con media cucharada de sal y media cucharada de pimienta y, una vez batidos, añadir el perejil. Mezlar bien y incorporar a la sartén a fuego medio, removiendo todo el tiempo con una cuchara de Adornar con aceitunas negras.