1Introducimos el helado en un molde rectangular forrado con papel film para moldearlo. Lo metemos al congelador.

2Batimos las claras a punto de nieve con el azúcar.

3Incorporamos las yemas, la harina tamizada y lo mezclamos todo.

4Extendemos en una bandeja de horno con silicona y lo metemos al horno a 180 grados durante 12 minutos.

5Lo retiramos de la bandeja y pasamos un rodillo por encima para amasarlo.

6Preparamos el almíbar con el azúcar y el agua, enfriamos.

7Empapamos el bizcocho en el almibar.

8Mezclamos la harina, el huevo y la leche, moviendo con las barillas para que no se formen grumos.

9Añadimos un poco de sal y lo dejamos reposar. Sacamos el helado del congelador y lo desmoldamos.

10Colocamos el helado sobre el bizcocho y lo envolvemos. Lo volvemos a meter en el congelador.

11Lo sacamos y lo pasamos por la masa de rebozado y lo freímos con abundante aceite caliente.

12Lo escurrimos y lo volvemos a enfriar hasta la hora que vayamos a servirlo.

13Al servirlo lo espolvoreamos con un poco de azúcar glas por encima y lo rociamos con un chorro de Cointreau para flambearlo.