1Lavá bien las frutillas, una por una. Reservá 8 para decorar.

2El resto pasalo por la licuadora.

3En una cacerola colocá las frutillas licuadas, agregale el azúcar.

4Con la ayuda de un grande, ponelas a hervir.

5Disolvé en un 1/4 taza de agua la fécula de maíz.

6Añadila a la cacerola y revolvé constantemente.

7Cociná durante 3 minutos.

8Aparte, en una taza diluí la gelatina en un poco de agua caliente.

9Agregala a la cacerola.

10Dejá enfríar la preparación en la heladera.

11Batí la crema de leche con batidora eléctrica hasta que espese, pero sin llegar a punto chantilly.

12Agregala a la preparación con movimientos envolventes y suaves.

13Batí las claras a nieve.

14Unilas al bol también con movimientos envolventes y suaves.

15Disponelas en copas y llevalas a la heladera un mínimo de 3 horas.

16Decoralas con las frutillas que separaste y si te gusta con crema chantilly.

17Servilas frías.