1Cortar la patatas en láminas finas.

2Frotar con el diente de ajo un recipiente que vaya al horno.

3Colocar una capa de patatas, cubrirlas con la nata líquida y echar sal y bastante pimienta.

4Volver a colocar una capa de patatas y de nata líquida y así continuamente hasta que se acaben las patatas.

5Tiene que quedar cubierto de nata líquida.

6Poner queso rallado encima y meterlo en el horno (precalentado) a temperatura muy alta (250º) durante aproximadamente 45 min.

7ara saber si está hecho pinchar las patatas y cuando el cuchillo se clave bien está listo para comer.

8Servir de acompañamiento con un pescado porque es un plato que llena bastante.