1Poner la gelatina en remojo en agua fría unos diez minutos.

2Poner el huevo y la gelatina remojada en el fondo de un bol, añadir la leche caliente revolviendo, y a continuación la esencia.

3Una vez enfriada la mezcla, añadir la nata montada.

4Verter el flan en un molde de fondo desmontable en una capa de unos 3 cm de espesor.

5Una vez espesado, verter encima la jalea hecha de zumo de espino amarillo en una capa delgada.

6Una vez solidificado el flan, separar cuidadosamente los bordes del molde y cortar porciones cilíndricas.

7Colocar una cubierta de chocolate sobre cada porción y decorar alrededor con jarabe de espino amarillo, espinos cortados en mitades y una hoja de melisa.

8Rociar el chocolate con azúcar glasé empleando un pequeño colador.

9Decorar finalmente la porción, por ejemplo con una orquídea comestible.

10Esencia de Espino Amarillo:

11Hervir unos 10 minutos a fuego lento el zumo con el azúcar, y reducir hasta que queden 2 dl de concentrado.

12Usar la mitad de la esencia resultante para el flan y la otra mitad para la jalea, con una lámina de gelatina remojada.

13Jarabe de Espino Amarill:

14Hervir los ingredientes a 104ºC hasta obtener una consistencia de jarabe.

15Glasé de Chocolate:

16Derretir el chocolate al baño María, cuidando de que no le entre agua. También puede hacerse en el microondas.

17Picar hielo en el robot de cocina, llenar de hielo el molde de las porciones y volcarlo sobre la mesa.

18La forma será la de cono truncado.

19Con la manga pastelera, cubrir el hielo de chocolate, formando una capa delgada y dejar endurecer.

20Extraer cuidadosamente el molde de chocolate glasé e invertirlo.

21Se pueden hacer varios recipientes de chocolate antes de que se derrita el hielo.