RECETA
- Para la base:
- 250 gr de galletas (tipo María)
- 125 gr de mantequilla derretida
- Una pizca de canela en polvo
- Para el relleno:
- 400 gr de crema de queso
- 400 gr de nata para montar
- 2 sobres de cuajada en polvo
- 1/2 vaso de leche fría
- 100 gr de azúcar
- Para la cobertura:
- 200 gr de frutillas (frambuesas, arándanos, fresas...)
- 50 gr de azúcar
- 200 ml de agua
- 3 Hojas de gelatina neutra
1Poner un poco de mantequilla en el fondo de un molde desmontable y encima coloca papel de hornear, así podrá desmoldar bien.
2Triturar las galletas y mezclar con la mantequilla derretida y la canela.
3Extender en el fondo del molde presionando y nivelando bien. Guardar en la nevera.
4Echar la nata y azúcar en un cazo la nata. Calentar a fuego medio-bajo hasta que empiece a cocer. Añadir entonces el queso y mover hasta que se integre bien. Diluir la cuajada en la leche y echar en el cazo, y sin dejar de remover esperar a que hierva, retirar del fuego, sin dejar de remover, durante unos segundos. Llevar de nuevo al fuego hasta que hierva de nuevo.
5Echar despacio en el molde encima de la base de galletas. Dejar que enfrie un poco. Y guardar en la nevera.
6Preparamos la cobertura: poner las hojas de gelatina en agua para hidratar, limpiar las frutillas, añadir el azúcar y el agua, poner a cocinar a fuego medio durante 5 minutos, pasado este tiempo se echa las hojas de gelatina, dejar enfriar unos minutos, una vez frío lo vertemos todo sobre la tarta y llevamos a la nevera hasta que cuaje (4 horas), esta tarta es mejor de un día para otro.