1Piña cristalizada: Picar una piña partida en trocitos no muy pequeños pues se reducen al cocinarlos.

2Escurrir bien.

3Poner en una olla algo extendida y con 1 taza de azúcar.

4Dejar hervir a fuego lento hasta evaporar el líquido.

5Pero antes de terminar de secar, agregar los albaricoques en trocitos previamente remojados, mínimo 6 horas y escurridos.

6Aparte en otra olla también extendida grande, poner las pasas y si se usa fruta cristalizada.

7Agregar el jugo de los albaricoques y poner a cocinar por 3 a 5 minutos.

8Agregar resto de fruta escogida y el ron.

9Hervir por otros 3 minutos.

10Revolver.

11Apartar y dejar enfriar bien.

12Reposar así ojalá 12 horas.

13Pasta: Batir mantequilla y agregar azúcar hasta cremar, agregar vainilla y huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición.

14Al disolver el azúcar agregar poco a poco a baja velocidad polvos cernidos: harina, sal, bicarbonato y especias.

15Al finalizar agregar parte de las frutas con su almíbar.

16Pasar la mezcla sobre resto de las frutas entre una olla grande.

17Terminar de mezclar con las nueces puestas en tres partes.

18Tener preparados los moldes engrasados y con papel encerado sólo al fondo, volverla engrasar y enharinar.

19Verter bien distribuida la mezcla pesándolos con su molde.

20Presionar un poco con la espátula la mezcla para sacar bolsas de aire y emparejar superficie.

21Precalentar el horno a 325°F con una cazoleja grande con agua caliente en la rejilla inferior.

22Poner queques en rejilla superior.

23Hornear rectangulares y chime­nea alrededor de 2 horas y extragrandes 2 1/2 horas.

24Sacar, pasar cuchillo en orillas y volcar sobre rejillas.

25Si se desea, bañar con sólo ron o sirope Karo, tibios sobre el queque caliente.