1Poner a remojo los garbanzos la noche anterior.

2Escurrirlos y ponerlos a cocer en una cazuela con agua hirviendo y espumarlos un par de veces.

3Añadir un poco de aceite, 1 cebolla, las zanahorias enteras, 2 dientes de ajo, una hoja de laurel y perejil, dejarlo cocer todo hasta que los garbanzos estén tiernos, vigilando que no se rompa el hervor.

4Mientras tanto, cocer las espinacas, picarlas y añadirlas a los garbanzos.

5Retirar la cebolla y las zanahorias que están en el potaje y unos cuantos garbanzos.

6Pasarlo todo por el chino y volverlo al potaje para que espese un poco.

7Retirar el laurel y el perejil. En una sartén rehogar la otra cebolla picada fina, 1 diente de ajo y una ramita de perejil picado, darles unas vueltas y añadirles los tomates pelados y picados. Salpimentar.

8Verter este sofrito en el potaje y dejarlo cocer un poco más.

9Antes de retirarlo del fuego añadir los huevos duros picados. Servir caliente.