1Limpiar bien el pollo quitándolo los restos de visceras y la piel.

2Luego, untarle la mostaza, echarle sal y pimienta al gusto y dejarlo marinar por unos 10 minutos.

3Para preparar la salsa de maní, pelar la cebolla y licuarla junto con los dientes de ajo y la ramita de cilantro.

4En una sartén, sofreír este licuado agregándole la salsa o mantequilla de maní y el cubito de caldo de pollo removiéndolo constantemente hasta que se mezclen bien los ingredientes, reservando para luego la salsa.

5En un caldero grande bien caliente derretir la margarina y sofreir los trozos de pollo hasta que estén bien doraditos y al cabo de 5 minutos agregar la salsa de maní caliente, removiendo el pollo para que se impregne bien con la salsa.

6Luego dejarlo unos minutos más hasta que el pollo esté bien cocido.

7Puede servirlo con arroz blanco o amarillo y una ensalada de su gusto.