1Trabajar la mantequilla y el azúcar hasta que la pasta esté cremosa.

2Después, uno a uno, se mezclan los huevos con la pasta anterior, añadiendo la levadura.

3Verter, poco a poco, la harina tamizada, el café soluble, el ron, las pasas y la raspadura de limón.

4Forrar un molde trapezoidal con papel de barba engrasado con mantequilla y verter la pasta en su interior.

5Distribuir por encima las guindas cortadas por la mitad.

6Colocar en el horno caliente durante unos 30 minutos.

7Se sabe si está en su punto cuando al introducir un cuchillo puntiagudo éste sale limpio.

8Quitar el papel y servir frío.