1Limpiar, flamear y trocear la pintada. Poner en una cazuela de barro.

2Agregar 2 hojas de laurel, 1 diente de ajo chafado y 1/2 litro de agua fría con 4 cucharadas de vinagre.

3Dejar macerar en un lugar fresco durante 4 horas.

4Escurrir la pintada y poner en una cazuela, dejar cocer a fuego moderado durante unos 10 minutos.

5Agregar los puerros y la mantequilla. Bajar el fuego y rehogar hasta que estén tiernos y transparentes.

6Espolvorear con una cucharada de harina, verter el vino y después la nata.

7Aromatizar con un poco de nuez moscada rallada, salar con el cubito de caldo desmenuzado y agregar un poco de pimienta.

8Llevar a ebullición, bajar el fuego, tapar la cazuela y dejar cocer 2 horas.

9Servir los trozos de pintada, echando por encima el fondo de cocción.