RECETA
- 1 pato de 1 1/2 kg. aproximadamente
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de salsa de soya
- 1 copa de vino de arroz o de jerez seco
- 1 cucharada de azúcar
- 1 clavo machacado en el mortero
- 1 cucharadita de pimentón
- 4 cucharadas de miel
- Sal al gusto
- Para la mesa:
- Crêpes mandarines
- Pinceles de cebolla
- Bastoncitos de pepino
- Salsa hoi-sin
1Limpiar el pato, salarlo ligeramente por dentro.
2Poner en un cuenco la salsa de soja, el vino de arroz, el azúcar, el clavo machacado y los dientes de ajo, mezclar bien y con una parte de esta mezcla untar el pato y luego espolvorearlo con el pimentón, mantener en reserva lo que ha quedado de la salsa en el cuenco.
3Calentar el horno a 200º c. Y dejar asar el pato durante unos 40 minutos, poner debajo una bandeja para recoger el fondo de cocción.
4La piel del pato, una vez asado, deberá quedar brillante y seca, casi transparente.
5Retirar el pato del horno, dejar que se enfríe un poco y con la ayuda de un cuchillo con buena punta y afilado quitarle la piel, cortarla en pedacitos y dejarla en una fuente mantenida al calor.
6Untar ahora el pato pelado con una mezcla compuesta de una cucharada de miel y de una cucharada de agua caliente.
7Subir la temperatura del horno a 220º c, volver a meter el pato y dejar que se ase durante otros 30 minutos, rociando el ave con el resto de la miel derretida caliente.
8Coger la salsa reservada, eliminar el ajo y mezclarla con el fondo de cocción del pato pasado por un tamiz fino.
9Servir el pato cortado en trozos de bocado y la piel acompañados de la salsa, una parte vertida sobre el plato y otra parte presentada en una salsera.
10Servir con crêpes madarines y las verduras, así mismo acompañar con salsa hoi-sin.