RECETA
- Cebolla
- Pimiento
- Ajos
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal, pimienta y laurel
1Se pone un buen chorro de aceite en una sartén o cazuela más bien honda. Para 1 kg de patatas hay que poner como un dedo de aceite.
2Pelamos y cortamos las patatas en rodajas de un dedo de grosor. Las lavamos y ponemos en el aceite junto a los ajos laminados gruesos y las cebollas y pimientos en trozos grandes, todo a la vez.
3Ponemos la sal, pimienta y el laurel, y removemos.
4El secreto del plato está en rehogar a fuego lento removiendo con cuidado para que no se peguen ni deshagan las patatas.
5Debemos mantener la sartén tapada y no añadir agua. Las patatas deben hacerse confitándose en el aceite y al calor del vapor que desprendan, aprovechando también el acumulado en la tapadera.
6Cuando se van dorando por abajo removemos con cuidado para que se vayan haciendo por igual. Estarán listas en 1/2 h. aprox.
7Escurrimos el aceite para que no resulten tan grasas. Queda bastante limpio y se puede guardar una vez colado.
8Servimos acompañando carnes, con huevos fritos, etc. También están buenísimas en tortilla.