1Con un cuarto de kilo de harina, la levadura y un decilitro de agua se hace una bola de masa, que se envuelve en un paño espolvoreado de harina y se deja guardado en un sitio libre de corriente de aire.

2Al día siguiente se pone la bola en un barreño, se añade la sal y el resto de agua y el café instantáneo y se va incorporando la harina, trabajando bien la masa para que quede elástica y correosa.

3Se da forma al pan y se ponen a crecer. Cuando haya doblado de volumen se cuecen a horno muy fuerte 15 minutos.

4Antes de meter el pan en el horno, puede barnizarse con una brocha mojada en agua.