RECETA
- 4 palomas de 600 g. aprox. cada una
- 4 dientes de ajo enteros con piel
- 2 cucharadas de mantequilla
- 4 cucharadas de vinagre de sidra
- 1 cucharada de mostaza de grano
- Perejil picado a tijera
- Sal y pimienta
1Limpiar y preparar las palomas. Desplumarlas completamente y quitar restos de pequeñas plumas.
2Quemarlas a la llama para no dejar rastro de plumas.
3Quitar las pezuñas y la cabeza.
4Eviscerarlas con cuidado de no rasgar la zona del vientre, eliminando los intestinos.
5Quitar la punta de las alas y seccionar el cuello.
6Sazonar el interior con la sal y la pimienta y atarlas con liz dejando bien sujetas las patas y aseguradas las pechugas.
7En una cazuela baja en la que quepan holgadamente las cuatro, derretir la mantequilla junto a los ajos, momento en el que colocaremos las palomas, dorándolas perfectamente por sus lados, rociándolas con su grasa.
8Introducirlas en un horno precalentado a 200 º durante 10 minutos.
9Durante ese rato rociarlas con su jugo al menos dos veces.
10Colocar las palomas sobre un plato y cubrirlas con una hoja de papel de aluminio, dejándolas reposar 5 minutos.
11Al jugo de asado que quedará en el fondo de la cazuela, le añadimos el vinagre, damos un hervor para quitar el gusto fuerte y añadimos la mostaza y el perejil, probando el sazonamiento.
12Trinchar las palomas dividiéndolas en 8 patas y 8 pechugas.
13Repartirlas sobre una bandeja caliente o platos y acompañarlas con el jugo recién hecho.
14Normalmente las patas de la paloma asada suelen quedar muy duras, podemos asar sólo las pechugas y guisar las patas con la receta tradicional, sirviendo las pechugas asadas y las patas con su salsa.
15Pero es desde luego un trabajo de chinos.