1Extendemos la masa de hojaldre sobre una superficie de trabajo y la cortamos en tiras de 1,5 cm de grosor y unos 20 cm de largo. El largo depende de tus gustos. Si quieres bastoncitos más cortos corta las tiras a tu estilo.

2Pintamos con huevo batido y cubrimos con abundante queso rallado. Enrollamos las tiras como un tirabuzón de manera que el queso se vaya quedando en algunas partes en el interior y colocamos con cuidado en una bandeja de horno.

3Horneamos a 190º unos 10-12 min hasta que el hojaldre haya crecido y el queso esté derretido y dorado. Ten cuidado de que el queso no se queme porque tiende a hacerlo con facilidad. Dejamos enfriar en la bandeja antes de retirar los palitos y los servimos a temperatura ambiente como aperitivo a acompañando platos en un bufé o en un picoteo variado.