1En un perol grande. El pan se pone húmedo con un poco de agua la noche anterior.

2Se pone un chorro generoso de aceite de oliva, se frien en él los ajos, varios dientes sin pelar y solo con una raja y los chorizos. Se sacan y se apartan.

3En ese aceite se pone el pan cortado a trocitos y remojado. Este es el secreto de las migas.

4El pan debe estar mojado en su justo punto, si no llegas se queda seco, si te pasas te puedes llevar horas hasta que se suelten y tomen el aspecto de migas.

5Se le añade la sal y a fuego muy lento se empiezan a mover para que se doren por fuera y se queden esponjosas y tiernas por dentro.

6Se le añaden los ajos, y se siguen moviendo.

7Se le ponen los torreznos y se siguen moviendo. Se mueven más y más.... Cuando vemos que están en su punto se apartan y se le añaden los chorizos.

8Hay quién en vez de chorizo le pone sardinas asadas, e incluso uvas.