1Partir los callos en trozos pequeños y ponerlos en un recipiente amplio.

2Cortar las manitas por la mitad en sentido longitudinal y ponerlas con los callos.

3Añadir los limones troceados, la sal y el vinagre.

4Restregar muy bien los callos con las manos para que se queden bien limpios.

5Seguidamente, lavarlos en varias aguas hasta que ésta sea completamente transparente.

6Escurrir los callos muy bien y ponerlos en una olla junto con las manitas.

7Cubrirlos con agua fría y acercarlos al fuego.

8Cuando empiecen a hervir, quitar esa agua y ponerlos de nuevo en la olla cubiertos de agua fría.

9Cuando hiervan de nuevo, incorporar la sal, la pimienta, el laurel, la mitad de la cebolla, los ajos y la hierbabuena.

10Dejar hervir durante 1 hora.

11A continuación ,incorporar los garbanzos y cuando lleven cociendo una hora, calentar el aceite en una sartén y hacer un sofrito con el resto de la cebolla, los ajos y el pimentón.

12Incorporar al menudo.

13Mezclar bien e incorporar los chorizos y las morcillas, dejándolo cocer hasta que todo esté en su punto con la salsa ligadita.

14Rectificar de sal antes de servir.

15Es importante vigilar la olla durante la cocción para añadir agua si fuera necesario.

16Como otros guisos, éste está mejor hecho de un día para otro.