11 Limpiamos bien los mejillones y los ponemos a cocer en una cazuela con el vino blanco, el perejil, el tomillo, el laurel, un trozo de cebolla y el zumo de un limón.

22 Una vez hervidos y abiertos, retiramos las conchas vacías. Añadimos un poco de sal a cada uno de los mejillones y dejamos reposar unos segundos. Luego, colamos el caldo de la cocción y lo reservamos.

33 Cogemos una sartén y ponemos a calentar un poco de mantequilla. Picamos la cebolla restante muy finamente y la doramos ligeramente en la mantequilla.

44 Esparcimos la harina por encima, añadimos el caldo de los mejillones que reservamos poco a poco y dejamos cocinar hasta obtener una crema espesa. Es importante mover la mezcla con frecuencia con una cuchara de madera.

55 Añadimos pimienta y sal al gusto, pero sin pasarnos, recuerda que los mejillones ya llevan sal. Colocamos los mejillones a la catalana sobre una bandeja, vertemos la salsa por encima y gratinamos al horno a temperatura media.

66 Cuando estén listos, los retiramos y los servimos. Esta es una receta de mejillones llena de tradición y sabor, con la que seguro sorprenderás a todos tus invitados. Más platos caseros, deliciosos y fáciles en mi blog La Cocina de Juani, ¿a qué esperas para visitarlo?