1Precalentamos el horno a 190º.

2Freímos un poco el aceite con una corteza de limón. No tenemos que esperar mucho, en cuanto empiece a humear lo retiramos y lo dejamos enfriar con la corteza de limón dentro para que infusiones un poco.

3Separamos las claras de las yemas. Batimos bien las claras casi hasta punto de nieve y añadimos las yemas, azúcar, canela y ralladura, mezclando bien con movimientos suaves.

4Tamizamos la harina sobre esta mezcla y ponemos también el aceite frío y colado. Mezclamos muy bien y dejamos reposar la masa en frío en la nevera unos 15 minutos.

5Llenamos las cápsulas hasta 2/3 de su capacidad, (las ponemos en una bandeja de cupcakes para que no se abran) y horneamos en la parte media-baja del horno con calor arriba y abajo. Estarán listas en unos 20 minutos. No se puede abrir el horno hasta el final y hay que dejarlas enfriar dentro del horno para que no se bajen.