RECETA
- 2 berenjenas pequeñas
- Medio kilo de salsa de tomate triturado (puede ser de lata)
- 2 dientes de ajo
- 1 ramito de albahaca fresca o un poco de oré
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta blanca molida
- Queso rallado al gusto para acompañar (opcional)
1Limpiamos las berenjenas. Puedes dejar la piel si es firme y lisa. Las cortamos en dados regulares y las ponemos en un colador espolvoreadas con sal para que suelten el amargor.
2Doramos el ajo laminado en una sartén con un fondo de aceite de oliva virgen extra.
3Añadimos las berenjenas y salteamos unos 10 minutos hasta que las berenjenas enternezcan. Hay que conseguir un punto en el que estén tiernas pero enteras. Tapa la sartén para aprovechar los vapores de la verdura.
4Todavía con la berenjenas más bien duritas añadimos el tomate y mezclamos. La berenjena se termina de hacer otros 10 minutos mientras que el tomate se fríe.
5Mientras tanto cocemos la pasta siguiendo las instrucciones del envase.
6Cuando la salsa esté lista (el tomate toma color y espesa), añadimos la albahaca picada o el orégano.
7Escurrimos la pasta sin aclararla bajo el grifo y la ponemos en la sartén con la salsa de berenjenas. Mezclamos bien hasta que se liguen los sabores y servimos al momento espolvoreada con pimienta recién molida y un poco de queso rallado si te gusta.