1Un segundo plato ligero perfecto para cuidar tu línea en comidas y cenas especiales como Navidad.

2Saca los lomos a la lubina y ponlos en una fuente apta para horno untada con un poco de mantequilla. Sazona, añade unos trocitos de mantequilla por encima y riega con un chorrito de aceite. Coloca un lomo sobre otro, vuelve a sazonar y hornea al vapor a 60 grados durante 10 minutos aproximadamente.

3Para la vinagreta de tomate, pela y pica el tomate y ponlo en un bol. Aderézalo con una pizca de sal, un chorrito de vinagre balsámico y las hojas de albahaca bien picadas. Mezcla bien y deja macerar. Riega con un poco de aceite en el último momento.

4Para las chips, corta la remolacha en rodajas finas con ayuda de la mandolina y fríelas por los dos lados en una sartén con aceite no muy caliente (con cuidado de que no se quemen porque amargan). Escúrrelas en un plato cubierto con papel absorbente de cocina.

5Para la tortilla, casca el huevo en un bol, sazona y bate bien. Ponlo en una sartén con una gotita de aceite y deja que cuaje a fuego suave. Repite la operación para hacer otra tortilla.

6Sirve cada tortilla en un plato y coloca encima un lomo de lubina. Riega con la vinagreta de tomate y dale un toque crujiente con las chips de remolacha. Espolvorea con perejil picado.