RECETA
- Lenteja, 350 gramos
- Tocino, 100 gramos
- Cebolla mediana, 1 unidad
- Hueso de jamón, 1 unidad
- Diente de ajo, 2 unidades
- Laurel, 1 hoja
- Pan, 5 rebanadas
- Aceite de oliva, 2 cucharadas
- Vinagre de vino, 1 cucharada
- Sal, al gusto
- Pimienta molida, al gusto
- Huevo duro, 1 unidad
1Poner las lentejas en agua fría y mantenerlas en remojo de 3-4 horas.
2Quitar las lentejas que hayan quedado en la superficie y poner el resto en un colador, lavarlas y ponerlas en una cazuela, cubiertas con agua, con el laurel, sal y el hueso de jamón.
3Acercar la cazuela al fuego y dejar cocer las lentejas a fuego suave hasta que estén tiernas.
4Pelar y picar la cebolla.
5Cortar el tocino en cuadraditos y freírlo en una sartén para que suelte la grasa, y añadir la cebolla, dejando freír hasta que comience a dorarse.
6Incorporar el sofrito de tocino y cebolla a las lentejas y mezclar.
7Poner aceite en una sartén y dorar los dientes de ajo pelados.
8Sacarlos, y ponerlos en un mortero.
9Freír una rebanada de pan en el mismo aceite de freír los ajos y machacarla en el mortero junto con los ajos.
10Cuando esté hecho una pasta, diluirlo con un poco de vinagre.
11Finalmente, incorporar el majado a las lentejas, sazonar con sal y pimienta, mezclar bien y dejar cocer durante unos minutos.
12Freír las cuatro rebanadas de pan y servir las lentejas bien calientes, adornadas con el picatoste y una rodajita de huevo duro.