1Limpiar todas las verduras, y cortarlas en pequeños trozos. La cebolla debe estar pelada anteriormente.

2Poner a calentar el agua con una pizca de sal. Cuando llegue a ebullición, añadir las verduras troceadas y dejar cocinar durante un cuarto de hora.

3Luego de este tiempo, retirar la cocción, y saltear en una cazuela con un chorrito de aceite.

4Condimentar esto con un poco de orégano y salpimentar a gusto.

5Servir cuando se cumplan los diez minutos de cocción.