1Hervir la pasta en abundante agua con sal hasta que esté al dente. Escurrir una vez hecha y reservar.

2Saltear en aceite de oliva los champiñones salpimentados, no cocinarlos mucho. Retirarlos de la cazuela y echar en ella las gambas, espolvorear con el ajo en polvo, un poco de sal y pimienta, remover. Añadir el vino y cocinar unos minutos a fuego medio para que evapore.

3Cuando las gambas estén hechas, retirarlas. Añadir la cebolla picada y el tomate, y cocinar unos 10 m. hasta que el líquido se reduzca a la mitad.

4Echar a la cazuela la nata removiendo continuamente y dejar cocer 2 minutos mas, hasta que espese ligeramente y se reduzca. Añadir entonces las gambas, el perejil y los champiñones, y rectificar de sal y pimienta si fuera necesario.

5Incorporar la pasta y remover bien para que la nata impregne toda la pasta. Espolvorear con queso rallado al gusto.