1Pese y mida los alimentos y téngalos listos; precaliente ahora el horno a 200 grados centígrados.

2Cierna la harina junto con el polvo para hornear.

3Aparte, en un tazón bata la mantequilla y el azúcar hasta que queden como una crema.

4Luego, agregue el huevo y, ya que todo esté bien batido, vierta la vainilla.

5Después, vaya añadiendo la harina paulatinamente.

6Separe la masa en dos partes; guarde una de ellas en un recipiente bien tapado mientras utiliza la otra.

7Extienda la masa con un palote, corte las galletas y colóquelas en una hoja para hornear; métalas al horno hasta que las orillas empiecen a verse doradas.