RECETA
- 1 Litro de Leche
- 150 Mililitros de Aceite de oliva
- 150 Gramos de Harina
- 220 Gramos de Azúcar
- 1 Limón (cáscara)
- 25 Gramos de Matalauva o Anís en grano
- 1 Cucharadita de Sal
- 1 Pizca de Canela en polvo
- 1 Puñado de Picatostes
11 Para empezar a preparar nuestras gachas, lo primero que debes hacer es tostar la harina de trigo. Para hacerlo simplemente ponla en una sartén a fuego medio, removiendo hasta que veas que queda tostado, con cuidado de que no se queme. Reservar.
22 Utiliza la misma sartén y caliente el aceite, entonces añade la cáscara de limón junto con la matalauva. Cocina para ambos ingredientes suelten sabor y aroma pero sin que lleguen a quemarse. Luego pasa por un colador el aceite aromatizado y vuelve a colocarlo en la sartén.
33 Seguidamente, añade la leche y cuanod veas que ya está caliente, retira un poco para disolver aparte la harina junto con el azúcar y la sal. Es importante que no quede ningún grumo. Entonces, podrás incorporar la harina disuelta en la sartén, poco a poco y removiendo de forma constante hasta conseguir una mezcla ligeramente espesa.
44 Continua con la cocción hasta conseguir una textura cremosa, como la de una crema pastelera. Cuando las gachas estén listas vacía la mezcla en un molde grande o en cuencos individuales, añade un poco de picatostes por encima y rocía con azúcar y canela por encima.
55 Las gachas cordobesas se comen frías, aunque si tienes muchas ganas puedes servirlas recién hechas, ligeramente templadas. Y si te gustan los postres llenos de tradición, como este plato típico de la estación otoñal, te recomendamos probar la famosa crema catalana.