1Se aliña la carne, a ser posible la noche anterior o un par de horas antes de que se vaya a freír.

2Se bate el huevo con una pizca de sal y se le añade el perejil y el diente de ajo muy picadito. Con esta mezcla se rebozan muy bien los filetes y se dejan reposar.

3Se pica la cebolla y el champiñón se lamina. Se fríe en una sartén la cebolla y el champiñón con una pizca de sal y tomillo.

4Cuando la cebolla y el champiñón estén ya fritos, se añade el tomate y una pizca de sal y azúcar. Se deja que se fría a fuego muy lento y se remueve de vez en cuando para que no se pegue.

5Mientras se hace la salsa, se rebozan los filetes en pan rallado. Se fríen los filetes, una vez empanados, al gusto.

6Se colocan los filetes en una fuente de horno y cuando la salsa esté lista (la salsa estará lista cuando empiecen a salir "pompas" del tomate, como si estuviera hirviendo) se echa sobre los filetes, repartiéndose uniformemente por toda la fuente y de manera que los filetes queden cubiertos.

7Se espolvorea sobre la salsa de tomate una pizca de pan rallado y sobre esté se añade la mozzarella rallada.

8Se gratina en el horno a 150 Cº unos 10 o 15 minutos.