1Las carnes de puerco, la col tipo berza, que aquí sustituyo por acelgas, son del platillo original así como el arroz.

2La carne seca la sustituí por un poco de machaca para darle algo del sabor.

3La farinha de mandioca, que también se sirve con la feijoada la eliminé por ser muy difícil de conseguir.

4En fin, con esta modesta adaptación la autora y sus amigos han podido disfrutar de buenos momentos.

5Al comprar, escoger frijol joven.

6Lavar y dejar de remojo durante toda la noche.

7A la mañana siguiente, muy temprano, ya que es un platillo para la comida, ponerlo a cocer a fuego medio con bastante agua en una cacerola muy grande con tapa.

8Agregar la machaca y el lomo canadiense que son más tardados en cocer y las hojas de laurel.

9A medida que el frijol se vaya cociendo agregar los otros menos el tocino.

10Cuando el frijol esté cocido, se mantiene la olla de frijol a fuego bajo y se prepara una sartén en la que se fríe el tocino hasta que se derrita la manteca y se dora la cebolla.

11Con un cucharón para frijol se retira del cocido a fuego bajo, dos o tres cucharones a la mitad, con puro grano de frijol y se pone en la sartén con el sofrito.

12Se mezcla y se aplastan, lo mas posible los granos con un tenedor como quien hace puré.

13Se condimenta con pimienta negra, unas gotas de tabasco y se vuelve a poner esta mezcla de granos aplastados, tocino y cebolla en la cacerola de la feijoada.

14Se mezcla bien y se rectifica la sal.

15Se retiran las hojas de laurel y se termina de cocinar cuando el caldo del frijol espese en la consistencia que tiene en México el caldo de frijol.

16Se lavan las hojas enteras de acelga, se quitan los tallos, se acomodan las hojas, por tamaño, una sobre otras, y se enrolla en manojo así recompuesto.

17Se corta estos rollitos en tiritas muy finas, como cabello de ángel. Se reserva.

18Poco antes de poner la feijoada en la mesa, se calienta una rueda de aceite de oliva en una cazuela, se doran dos dientes de ajo y se pone la acelga.

19Mover y tapar unos minutos la cazuela a fuego bajo, para que se rehogue con el vapor.

20Pelar ocho naranjas maduras y dulces.

21Quitarle la piel blanca y rebanarla finamente.

22Acomodarlas en una fuente.

23Presentar la salsa de chile de árbol en la mesa.