1Se tiene 1/2 kilo de garbanzos durante un día a remojo, y se cuecen al día siguiente. Se cogen dos panes de pita y se secan durante un día al sol. El garbanzo y el pan se muelen juntos en una moledora, sin que quede demasiado fino, y se echan ajos machacos, pimientos rojos, etc. Se deja reposar.

2Se caliente aceite vegetal a 100 ºC. Si no tenemos molde podemos inventarlo. La freímos, se deja reposar una o dos horas. Se coge el pan de pita, se abre, echas un tomate, lechuga, pasta de sésamo o yogur, comino, sal. Se enrolla y se come.