1Elegir esparrárragos frescos que tengan todavía algo de liquido al estrujar el tallo por el final.

2Pelar los espárragos y quitarles un poco del tallo ya que suelen estar duros.

3Los espárragos trigueros se cuecen atados de 6 en 6 en agua hirviendo con sal.

4cocer hasta que notemos que al pincharlos están blandos.

5Los esparragos blancos se oxidan por lo que al pelarlos es necesario frotarlos con un limón.

6Atamos los espárragos de 6 en 6 y los metemos 1 minutos en agua hirviendo con sal y azúcar para que suelten en ella el amargor.

7Sacarlos y meterlos en otro puchero con agua con sal y azúcar hirviendo.

8Retirarlos y refrecarlos sumergiendolos en agua fría.