1Para la salsa de frijoles, pica media cebolleta y ponla a pochar en una cazuela con un chorro de aceite de oliva y una pizca de sal. Añade dos ramitas de tomillo fresco. Incorpora los frijoles. Vierte su propio jugo y caldo de pollo hasta cubrirlos. Cocínalos durante 15 minutos. Retira el tomillo y tritura la salsa. Ponla a fuego suave y deja que reduzca.

2Pica el chorizo y el chile jalapeño y fríelos con un poco de aceite de oliva. Reserva.

3Fríe las tortillas en aceite de girasol unos segundos a fuego suave, hasta que queden flexibles. Escúrrelas en papel absorbente. Sazónalas.

4Deshilacha las pechugas y coloca un puñado en cada tortilla. Cierra las tortillas y ponlas en un plato. Riégalas con abundante salsa de frijoles. Añade por encima el chorizo y el jalapeño fritos. Espolvorea con queso fresco picado. Sirve.

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