RECETA
- 1 cidra.
- 400 g de azúcar.
- Zumo de un limón.
- Piel de un limón.
- 2 ramas de canela.
- 3 clavos de olor.
- 1 cucharadita de jengibre rallado.
1Trocear la cidra (con cáscaras).
2Retirar las semillas y hervir los trozos en una olla exprés con agua y una rama de canela durante 30 minutos.
3Dejar enfriar en un escurridor para que vaya soltando el líquido sobrante.
4Separar la cáscara de la pulpa, aprovechando ésta al máximo posible.
5Escurrir bien la pulpa estrujando con las manos.
6Colocar la pulpa en una cacerola junto con el azúcar, el zumo y la cáscara de limón, la otra rama de canela, los clavos y el jengibre.
7Se deja a fuego bajito durante una hora aproximadamente, removiendo constantemente, hasta que adquiera una bonita transparencia.
8Y ya tenemos nuestro propio "cabello de ángel"
9Resulta exquisito con el aroma del limón y la canela y el toquecito picante del clavo y el jengibre.
10En realidad es una tarea sencilla pero bastante laboriosa, entretenida, que nos llevo bastante tiempo.
11Lo más rápido era "manufacturar" unas empanadillitas con esas obleas que ya vienen preparadas.
12Las metimos al horno, con un poco de azúcar morena por encima, unos cuantos pinchazos, 20 minutos a 180º C.
13Y acompañadas de un té verde, deliciosas y la satisfacción del deber cumplido.