1Las gambas deben de estar peladas. El ajo en láminas de grosor al gusto.

2Se dora el ajo en aceite de oliva, que cubra el fondo de la cazuela (si es de barro, mejor). Cuando esté dorado el ajo, se echan las gambas y el perejil. Se dejan 2 minutos y se apaga el fuego.

3Por otro lado, se van tostando las rebanadas de pan. Cuando se enfríen se untan con una capa fina de mayonesa y se van cubriendo con los ajitos y las gambas, procurando no echar mucho aceite.