1Cortar naranjas y limones a cuartos y quitarles la piel.

2Cortar la piel en juliana quitándole el blanco.

3Trinchar la pulpa groseramente, retirando las pepitas y poniéndolas en una bolsita de muselina.

4Poner la pulpa y la bolsa con la pepitas en un cazo con 2,5 litros de agua fría.

5Tapar con una película de plástico y dejar en reposo una noche.

6A la mañana siguiente llevar lentamente a ebullición (este proceso suele llevar 1 hora).

7Cocer hasta que las pieles estén verdaderamente tiernas y transparentes, lo que suele ocupar otra hora u hora y media.

8Retirar la bolsa y cocer unos minutos más.

9Añadir el azúcar caliente y calentar lentamente revolviendo de cuando en cuando hasta que se haya disuelto.

10Añadir la melaza.

11Llevar nuevamente a ebullición hasta alcanzar el punto deseado de espesor, entre 20 y 50'.

12Retirar del fuego, dejar enfriar 15' y envasar.