11 Para empezar a preparara los croissants limpie una superficie amplia donde trabajarás la masa. Haz dos volcanes de harina, uno con 125 gramos y otro con el resto. Recuerda tamizar la harina antes.

22 En el volcán pequeño, mezcla la levadura y un poco de agua tibia. Amasa hasta que se integre todo y forma una bola. Deja que fermente dentro de un bol con agua hasta que quede como una esponja.

33 Mezcla todos los ingredientes, menos la mantequilla, en el otro volcán de harina. Amasa hasta integrar todo de forma homogénea y une esta segunda masa con la primera en forma de esponja.

44 Amasa ambas preparaciones durante unos 10 minutos. La masas de los croissants debe ser elástica, ligeramente húmeda y que se despega con facilidad de la mesa de trabajo y de las manos.

55 Haz una bola con esta masa y haz dos cortes que formen un cruz en la parte superior. Deja que repose unos 10 minutos.

66 Después de este tiempo, estira la masa, dejando el centro un poco más grueso que los extremos, y añade en el centro la mantequilla. La mantequilla se debe derretir y dejar enfriar a temperatura ambiente.

77 Cierra la masa como si fuera un sobre. Luego aplasta con ayuda del rodiilo y vuelve a doblar, repite esta operación un par de veces.

88 Cuando ya tengamos listo el hojaldre podremos proceder a preparar los croissant. Estiramos la masa dejándola de unos 40 centímetros de ancho, el largo da igual.

99 Corta la masa por la mitad y luego corta triángulos de unos 8 centímetros de base. Luego, enrollamos estos triángulos estirando ligeramente las puntos y consiguiendo la forma típica del croissant.

1010 Coloca los croissants de hojaldre en una placa de horno, humedece cada uno de los panes con una pincelada de agua y deja que reposen hasta que doblen su tamaño.

1111 Finalmente pinta los croissants de hojaldre con huevo batido y lleva al horno a 225º C. por 10-15 minutos. Al sacar del horno se pueden abrillantar con un poco de miel rebajada o almíbar, pero es algo opcional.