1Poner las judías en un recipiente amplio, cubrir con agua fría y dejarlas en remojo durante ocho horas.

2Cuando se vayan a preparar, escurrirlas y ponerlas en una olla, cubrirlas con agua fría y acercarlas al fuego.

3Cuando comiencen a hervir, quitarles el agua y ponerle otra nueva fría.

4Poner al fuego de nuevo y dejar cocer a fuego suave.

5Pelar los dientes de ajo y cuando las judías estén casi tiernas, agregarlos, junto con un poco de sal y dejar en el fuego hasta que estén en su punto.

6Trocear los pimientos, pelar y picar una cebolla y agregarlos.

7Añadir las bolas de pimienta y la guindilla y cocer durante diez minutos, agregando un poco más de agua, si fuese necesario.

8Calentar las tres cucharadas de aceite en una sartén y rehogar la cebolla restante, finamente picada hasta que esté transparente y comience a dorarse.

9Hacer un puré con las judías y agregarle la cebolla frita.

10A continuación, colocar el puré de judías en una cazuela de barro u otra que pueda sacar a la mesa y ponerla al fuego;

11Cuando comience a hervir, cascar los huevos y dejarlos hasta que estén escalfados.

12Servir inmediatamente.

13Se pueden acompañar con cuadraditos de pan fritos crujientes.