RECETA
- 1/2 kg de espinacas
- 1 patata
- 150 g de queso gorgonzola
- 1/2 yogur
- 250 ml de leche
- 100 g de anacardos
- 1 rama de apio
- 1 cucharadita de azúcar moreno
- 10 g de agar agar
- agua
- 1 cucharadita de vinagre de Módena
- aceite de oliva virgen extra
- sal
- vinagreta
1Para la crema de espinacas, pon a cocer la patata troceada y las espinacas (reserva unas 8 para decorar) en una cazuela con agua y sal. Tapa y cocina a fuego suave durante 15-20 minutos. Pasa el conjunto a una batidora de vaso, adereza con un poco de vinagreta y tritura. Reserva caliente.
2Para la gelatina, calienta la leche con el queso en una cazuela y cocina hasta que se funda. Añade el agar agar, y deja que hierva durante 5-10 minutos sin dejar de batir con la varilla. Aparta del fuego, incorpora el yogur y mezcla bien. Pasa el conjunto a unos cuencos y deja enfriar en el frigorífico hasta que gelatinice. Desmolda y corta la gelatina en tacos.
3Tuesta los anacardos en una sartén con el azúcar moreno. Añade el apio y saltea. Vierte el vinagre y cocina hasta que se caramelicen. Reparte los anacardos sobre un trozo de papel y deja enfriar en el frigorífico para que queden bien crujientes.
4Sirve la crema de espinacas en el fondo de un plato y acompaña con unos anacardos y tacos de gelatina. Riega todo con un chorrito de aceite y decora con unas hojitas de espinaca aderezadas con un poco de vinagreta y unos cristales de sal.