1Sazona la carne con sal, pimienta y pimentón.

2Calienta la mantequilla y el aceite en una cazuela a fuego vivo.

3Incorpora parte de la carne.

4Sálteala rápido, sácala y resérvala al calor.

5Fríe el resto del mismo modo.

6Al terminar, fríe despacio en la misma grasa y la cebolla cortada en tiras.

7Cuando esté blanda, añade los tomates pelados y sin pepitas; añade también la carne, revuélvela y llévala a ebullición.

8Déjala así durante 1 hora y media.

9Pasados 20 minutos, comprueba si hierve despacio, y regula el fuego.

10Terminada la cocción, prueba y rectifica el punto de sal, añade el yogur, espolvorea la superficie con perejil y sírvelo caliente.