1Limpiar bien los champiñones, retirando la parte terrosa.

2Separar los sombreros de los tallos y sumergir estos últimos en agua.

3Frotar los champiñones con el limón para que no se ennegrezcan.

4A continuación, engrasar una lata de horno con un poquito de mantequilla y poner en ella los champiñones, colocándolos con la parte cóncava hacia arriba.

5Sazonar con sal y pimienta y rociar con 40 g de mantequilla derretida.

6Introducir en el horno, precalentado a 350°f(180°c), durante 5 minutos.

7Mientras tanto, secar los tallos y picarlos.

8Calentar una cucharada de mantequilla y saltearlos junto con la cebolla.

9Cuando hayan soltado todo su líquido y el fondo do cocción se haya evaporado, sazonar con sal y pimienta y añadir la salsa de tomate diluida en el caldo, el ajo y el perejil.

10Incorporar unas gotas de jugo de limón y dejar reducir la salsa, cocinando a fuego medio.

11Retirar el preparado del fuego, añadir una cucharadita de mantequilla y rectificar la sazón.

12Por último, retirar la lata con los champiñones del horno y rellenarlos con la preparación anterior.

13Espolvorear por encima con pan rallado y rociar con mantequilla derretida.

14Introducir de nuevo en el horno y cocinar durante 30 minutos.

15Servir de inmediato.