RECETA
- 1.550 gr. de cardo fresco (u 800 gr. de cardo cocido al natural)
- 50 gr. de queso mantecoso
- 4 ramas de perejil fresco
- 8 almendras crudas
- 8 almendras tostadas
- 2 cucharadas de harina
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 2 cucharadas rasas de mantequilla blanda
- 1/4 litro de caldo de pollo
- 1/4 litro de leche
- Sal y pimienta blanca
1Se limpia el cardo (aconsejable hacerlo con guantes para evitarse pinchazos) y una vez peladas, se cortan las pencas (que deben quedar suaves al tacto), se pasan a una cazuela con agua fria y unas rodajitas de limón sin exprimir.
2Dejar un rato en remojo. Posteriormente se elimina el agua del remojo, se vuelve a añadir agua fría y se vuelve a meter el cardo con un poco de sal.
3Se pone a fuego lento para que cueza hasta que el cardo quede tierno (truco: para que no ennegrezca se añaden 2 cucharadas de harina).
4En una sartén grande se pone el aceite, las almendras crudas machacadas, la mantequilla, la harina y sal.
5Se mezclan en frío todos los ingredientes con una cuchara de madera y una vez todo bien mezclado se va vertiendo poco a poco y sin dejar de remover el caldo de pollo templado y después la leche también templada.
6Se pone a cocer a fuego suave y se remueve constantemente y a partir de que rompa el hervor contar aproximadamente 15 minutos.
7Si hiciera falta se puede añadir más caldo de pollo, ya que deberá quedar trabada, pero no espesa.
8Posteriormente se colocan los trozos de cardo sumergiéndolos en la salsa.
9Rectificar el punto de sal y añadir una pizca de pimenta blanca.
10A continuación mover la sartén con energía Por último se añaden las almendras tostadas picadas y todas las hojas de perejil picadas, así como el queso rallado.
11Servir inmediatamente y a ver qué tal... yo creo que para chuparse los dedos.